Ciudad Victoria.- Es oficial: José Ramón Gómez Leal, conocido como “JR”, es el candidato de Morena a la senaduría vacante. La Comisión Nacional de Elecciones anunció su decisión después de analizar las encuestas utilizadas para seleccionar al mejor de los cinco aspirantes o eso decía. La noticia sacudió, aunque también heló y hasta electrocutó a más de uno con su carga sorpresiva.
“La esperanza de México” es el único partido que utiliza encuestas como método de selección de candidatos y, si bien no son inservibles en lo fundamental, la forma en que las maneja causa muchas decepciones; casi nadie queda conforme y flotan a menudo las sospechas de fraude, ya que el partido nunca exhibe la documentación y obliga a los contendientes a firmar un voto de silencio. ¡Y eso que defiende la democracia!
Morena es el partido de la paradoja, de lo ilógico y de lo inconcebible. Cuando llueve, rechaza el paraguas; y cuando asolea, viste impermeable. Si los simpatizantes dicen “este”, el partido se esfuerza por nominar al más impopular. No respeta ni las fechas de su propia convocatoria. El anuncio del candidato estaba fijado para el jueves 22, pero decidió súbitamente hacerlo el martes 20.
Por la premura del proceso, derivado de la muerte repentina del senador Faustino López Vargas, no hubo tiempo para un sondeo previo que midiera el posicionamiento de los aspirantes. La elección se verificará el 19 de febrero de 2023, y las campañas arrancan el 28 de diciembre. Recientemente, se publicó un sondeo para proyectar a Carlos Canturosas como el favorito, pero nadie lo creyó. En internet, el único que ha estudiado las preferencias para elegir a senador en Tamaulipas es Massive Caller, y sus resultados no coinciden con la encuesta de Morena.
Massive Caller no elaboró una encuesta para la elección extraordinaria de senador sino para la de 2024. Como quiera, documenta las preferencias electorales mes con mes de este año, y sus datos pueden ser válidos para el proceso de 2023.
De acuerdo con el sondeo de esta empresa, actualizado al 27 de noviembre, Morena tiene una preferencia de 52.5 por ciento en la elección de senador. Le sigue, muy lejos, el PAN, con 21 por ciento, y más atrás el PRI, con 7.5 por ciento. Penosamente, al tricolor lo superan con 9.3 por ciento los indecisos.
La pregunta fundamental de este ejercicio tiene que ver con la persona favorita de los electores. “¿Quién le gustaría que fuera el candidato a senador?”. Ante esta cuestión, las respuestas fueron contundentes. En Morena, Mario López Hernández, la “Borrega”, es el primer lugar en preferencias, con el 19.3 por ciento; le siguen Maki Ortiz, con 17.1 por ciento, José Ramón Gómez Leal, con 15.3 por ciento y Carlos Cantusosas, con 12.6 por ciento. El penúltimo lugar es para Erasmo González Robledo, con 5.3 por ciento.
En cambio, en el PAN todos están condenados a perder, y los responsables son Francisco e Ismael García Cabeza de Vaca, quienes abusaron del poder de 2016 a 2022. Pero la misma pregunta acerca del candidato favorito entre panistas arroja resultados interesantes. El mejor posicionado es Chucho Nader, con 33 por ciento de las preferencias, seguidos por Ismael García, con 22 por ciento y Gerardo Peña Flores, con 12.8. Si menciona a Ismael, hay de repetirlo, es porque la encuesta mide a posicionados para la elección del 2024. De hecho, el alcalde de Tampico ha subido en las preferencias, pues pasó de 31.7 por ciento en octubre a 33 por ciento en noviembre.
Este es el único estudio de intención de voto para elegir a senador en Tamaulipas, pero no corresponde a la elección extraordinaria. Sin embargo, tampoco hay otro que abarque de enero a noviembre de 2022. Su valor radica en que analiza el posicionamiento de los morenistas más conocidos y, con la excepción de Maki Ortiz y Carlos Canturosas, que no se registraron para el proceso de 2023, ya señala al mejor calificado.
Ese aspirante mejor calificado es Mario López, la “Borrega”, y no lo dicen los cuestionarios del partido, sino una encuestadora externa que no trabaja para ningún aspirante. El resultado de este ejercicio revela que los morenistas quieren un verdadero representante de la 4T y no solamente a alguien conocido.
El sondeo de Morena, en cambio, favorece el conocimiento de un exfuncionario por su rostro y su nombre, pero no por su trayectoria y dedicación al movimiento lopezobradorista. Ese exfuncionario es Juan Ramón Gómez Leal, primer coordinador de Programas Federales en el estado.
A las bases y simpatizantes les extrañará cómo el partido pudo fijarse en el cuñado de Francisco García Cabeza de Vaca, por mucho que ahora estén separados y en pugna. Es sabido que el exgobernador apadrinó por años la carrera política de JR dentro del PAN.
En efecto, una vez más llega un panista a una candidatura mayor en Morena, el partido que prefiere arropar a gentes del PAN y del PRI antes que a su propia corriente social.
Ha ganado la candidatura la publicidad y el influyentismo, lo más ajeno a la 4T. Han perdido, de nuevo, los auténticos morenistas.
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