Hipódromo Político/ Por Carlos G. Cortés García

(20-Septiembre-2023)

MUCHOS POLÍTICOS SON MENTIROSOS… Y LUIS TORRE ALIYÁN NO ES LA EXCEPCIÓN

• El ex priísta, ex panista, ex morenista y hoy emecista, Luis Torre Aliyán, es un personaje que destaca por sus cuentos y por desear como nadie llegar a ser alcalde de Victoria, al costo que sea, para descargar sus frustraciones en contra de quienes no piensan como él y que él cree que no lo quieren y lo han zancadilleado para llegar al poder. Está claro que Torre no va a ganar, pero ha hecho de todo para conseguir una candidatura que, ni modo, hay que decirlo, le queda muy grande.

No crea Usted que esta columna tiene dedicatoria especial para quien sueña con ser el candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Victoria, Luis Torre Aliyán, quien ha chapulineado del PRI al PAN, luego a MORENA y ahora a Movimiento Ciudadano, en donde tampoco tendrá mucho que hacer, dada su incapacidad e impericia política. La realidad es que, aunque presuma Torre Aliyán que tiene “piel gruesa”, eso no le quita que la gente no haga click con él, y lo desprecian, porque ya conocen la clase de político que es. Y no es, por cierto, un político honesto y que hable con la verdad.

Dicen quienes conocen la “historia de amor” entre Torre Aliyán y Xicoténcatl González Uresti que, las diferencias entre ambos, irreconciliables por cierto, surgieron porque el facultativo no le permitió a Torre Aliyán meter las manos a la caja de las galletas, y por ese motivo se rompieron las medias, se arañaron y se jalaron los pelos, lo que terminó con la salida del entonces síndico del PAN para irse a la búsqueda de la candidatura de MORENA a la alcaldía de Victoria, “competencia” en la que por supuesto, el actual alcalde Eduardo Gattás Báez le bailó un jarabe tapatío al inexperto político, cuyo único mérito para estar en la política fue ser sobrino del Gobernador, Egidio Torre Cantú, quien lo despreció, a pesar del parentesco, a lo largo de los seis años que duró en el pináculo del poder.

El problema de muchos políticos de los que conocemos, como es el caso de Luis Torre Aliyán, es que son los campeones del cuenta-cuentismo. Mienten con una facilidad que da pavor: lo hacen una vez, otra vez y otra vez, y cuando se les olvida que ya te habían cuenteado, vuelven a mentir. Pero eso, en este caso, no es novedad. Y Luis se siente instalado ya en la candidatura y flota cuando debería caminar y poner los pies en la tierra, porque debe entender que mientras más alto vuele más duro va a ser el… batacazo. Y a la gente la ve de arriba hacia abajo, aunque eso no esté fácil.

Y es que, honestamente, los ciudadanos ya estamos cansados de promesas sin cumplir, de cuentos y más cuentos, de sueños guajiros y de que algunos políticos, como Torre Aliyán, se suban al ladrillo y se mareen, y se sientan intocables y de otro mundo. Y mientras al amparo del poder público traen guardaespaldas, cuidadito y te les quieras acercar porque hasta al bote te van a querer llevar. Pero cuando se les acaban los recursos públicos y el poder, y vuelven a ser ciudadanos comunes y corrientes, entonces tienen que aguantar los reclamos e insultos de quienes fueron sus patrones y a quienes trataron mal, los ciudadanos, y que les reclamen sus actitudes estúpidas y presuntuosas. Por poner a Xicoténcatl de ejemplo, ni tres años le duró el gusto de los pingues negocios y el poder y de repente dejo de ser y fue “investido”, nuevamente como un común y corriente ciudadano, y en una de esas, más corriente que común.

Hablando del ex alcalde, hace algunas semanas lo encontramos en un supermercado de Victoria, como cualquier hijo de vecina que va a hacer el mandado, empujando el carrito y sin un “guarro” que tan siquiera le ayudara a empujar o atendiera el celular de “tan importante personaje”. Los sueños de grandeza de Xicoténcatl se le acabaron antes siquiera de terminar la administración para la cual fue electo, debido a las acusaciones de corrupción y de raterías que aún pesan sobre él y sobre su familia, procesos judiciales que aún no están concluidas, por cierto, y que en una de esas podrían llevarlo a la ergástula.

Entonces, no debe de sorprendernos nada. Ha iniciado ya el proceso electoral 2023-2024 y vamos a ver el milagro de la multiplicación de los políticos, por lo que deberemos ser cuidadosos porque no vaya a ser que en una de esas vayamos a atropellar a un candidato, y con tan mala suerte, que ese candidato podría ser el propio Torre Aliyán, quien ahora anda de “lambeache” de Dante Delgado, de Arturo Diez Gutiérrez, de Gustavo Cárdenas, de Juan Carlos Zertuche y hasta de Rigoberto Ramos, precandidato a la alcaldía de Reynosa. Es decir, con tal de aparecer en la boleta electoral, lo que no signifique que va a ganar, claro, Luis Torre Aliyán, anda cargando el maletín de todos estos personajes. ¡Qué vergüenza!

Me parece que hoy los partidos políticos deben analizar profundamente a quienes aspiren a ser sus candidatos y representarlos en la próxima elección, en temas de conocimientos, honestidad, equilibrio emocional, capacidad, profesionalismo y reconocimiento social, porque creo que de Xico’s, en el caso de Victoria, los ciudadanos ya estamos hartos: el facultativo dejó una ciudad terrible en materia de baches, con un déficit de instalaciones en tema de agua potable y una ciudad sucia, escandalosamente desaseada, oscura y lúgubre. Pero eso sí, la camioneta de lujo desde el primer día, los guarros, los lujosos viajes, los excesivos gastos de representación y los negocios particulares, para el entonces alcalde y sus allegados, no dejaron de fluir todos los días, pero hasta en eso, Xicoténcatl fue miserable con los suyos. Y entonces de ahí el encabronamiento de Torre Aliyán porque no lo dejaron ganarse unos “cuantos pesillos”. Y entonces surgió la idea de su pomposamente llamada “videocolumna” del abogangster enemigo
, desde donde Torre Aliyan escupió todas sus frustraciones contra González Uresti, frustraciones que ahora Torre anhela llevar a la presidencia municipal de Victoria.

Ante ese terrible escenario que no ocurrirá, eso es seguro, hay quienes están pensando mudarse de ciudad, porque dicen que la venganza de Torre Aliyán será implacable: de ganar el abogado enemigo la elección del próximo mes de junio, aseguran que hará todo lo que no se le dejó a hacer durante la administración de Xicoténcatl, a lo que muchos ya, desde hoy expresan, “Ay Nanita”.

Por ello, teniendo las cartas que van a competir, los ciudadanos debemos analizar bien, muy bien, a quien daremos nuestro voto, porque con la ciudad no se juega, y un alcalde frustrado y vengativo es un caldo de cultivo para una ciudad que pierda sus capacidades y la calidad de vida. Los ciudadanos ya sabemos que con nuestra credencial de elector en la mano podemos hacerle un bien a Victoria o un mal. Pensemos en el futuro de Victoria y en nuestros hijos, y nietos y en la viabilidad de esta hermosa Perla tamaulipeca. Y no le demos el voto a cualquier cuenta-cuentos que nos baje el sol, la luna y las estrellas, aunque se apellide Torre Aliyán, porque la factura que pagaremos por una decisión equivocada sin duda será muy alta.

PD. 1. Con base en lo que hemos visto de resultados en las acciones legales emprendidas por el PAN de Tamaulipas, el presidente de ese partido, Luis René Cantú Galván, la nueva demanda que interpondrán contra MORENA tampoco la ganará. “El Cachorro” debería de entender que la política, la política, no es lo suyo, y que no ha dado una, y que ya es tiempo de retirarse de la política, aunque no lo hace porque su sueño más guajiro, por decir lo menos, es ser alcalde de Reynosa, lo que tampoco no ocurrirá.

Cosa nada más de hacer un análisis de los resultados de las elecciones desde que llego “El Cachorro” a la presidencia del partido para entender que lo que ha hecho bien, pero muy bien, es empinar al PAN tamaulipeco y, como buen pendenciero, pelearse con todos. En resumen, su política de restar y dividir en lugar de sumar y multiplicar, no les augura buenos resultados a los azules en las próximas elecciones, por lo que debiera dejar el lugar a alguien que si le sepa y que si quiera al partido. Tiempo al tiempo.

No podemos perder de vista los pésimos resultados que Luis René consiguió en el Congreso de Tamaulipas, cuando llegó de líder parlamentario, e hizo que varias diputadas se fueran del grupo panista, debido al mal trato que les dio y a que no fue generoso, en todos los sentidos, con sus compañeros legisladores. Loa malos tratos no se olvidan ni los excesos tampoco. Y “El Cachorro” tiene muchas historias en donde personas se han alejado del reynosense por su prepotencia y abuso de su poder.

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