#DESDELAFRONTERA/ POR PEDRO NATIVIDAD

(21-Febrero-2024)

CARLOS CANTUROSAS LA TIENE FACILITA

Carlos Canturosas, el ex alcalde de Nuevo Laredo y actual candidato de la alianza Morena-Verde-PT, a la diputación federal por el distrito 1, tiene la victoria asegurada en las próximas elecciones. Su popularidad y arrastre entre los ciudadanos es indiscutible, y sus contrincantes no tienen nada que hacer frente a él.

Canturosas cuenta con el respaldo de la gente, que lo recuerda como un buen gobernante que impulsó el desarrollo de la ciudad. También cuenta con el apoyo de las principales figuras de Morena, como el presidente Andrés Manuel López Obrador; la candidata a Presidenta de la República, Claudia Sheinbaum y su hermana Carmen Lilia Canturosas, quien será la próxima presidenta municipal de Nuevo Laredo.

En cambio, sus adversarios políticos son débiles y cuestionados. Por el PAN, el candidato es Félix «El Moyo» García, un diputado local que ha sido señalado de ser el principal operador del ex gobernador Francisco Cabeza de Vaca en el Congreso del Estado. García ha sido señalado de favorecer a Cabeza de Vaca para que éste quedara protegido una vez que terminara su mandato.

García no tiene el carisma ni la aceptación de la gente de Nuevo Laredo, pues sus triunfos electorales se debieron a que el PAN estaba en el poder y a que fue arrastrado por los candidatos ganadores de ese entonces. Ahora, sin el apoyo del gobierno estatal, ni del federal, su campaña está destinada al fracaso.

Por el MC, el candidato es Alfonso Salas, un ex panista que traicionó a su partido para buscar nuevas trincheras, porque las azules ya no le servían de nada. Salas fue rector de la Universidad Tecnológica, no por su capacidad, sino porque tenía un buen padrino que siempre lo sostuvo ahí. Pero al ver que el PAN se hundía, decidió saltar a otro barco.

Salas tampoco tiene el respaldo ni la confianza de los ciudadanos, que lo ven como un oportunista y un traidor. Su candidatura es testimonial y no representa ninguna amenaza para Canturosas.

Así pues, Carlos Canturosas tiene el camino libre para llegar a la Cámara de Diputados, donde seguramente defenderá los intereses de Nuevo Laredo y de todo Tamaulipas. Su triunfo será contundente y reflejará el sentir de la mayoría de los votantes, de esos neolaredenses que lo recuerdan con cariño

LA UAT TAMBIEN DENUNCIA A CABEZA DE VACA

La Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) ha denunciado ante la justicia al ex gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca y a varios ex funcionarios estatales y universitarios, por el presunto desvío de más de 180 millones de pesos, que afectan el patrimonio y el funcionamiento de la máxima casa de estudios.

Según el abogado de la UAT, José Carlos Mora García, se encontraron graves irregularidades en el proceso de entrega-recepción, que podrían ascender a los 500 millones de pesos. Entre ellas, destaca que el Gobierno del Estado no entregó a la Universidad las participaciones que le correspondían, y que en su lugar, le ofreció un inmueble sobrevalorado en Reynosa, mediante un contrato de dación de pago ilegal.

El inmueble, que supuestamente valía 187 millones de pesos, en realidad tenía un valor real de 13 millones, según el avalúo del ingeniero Maximino Ortiz Benavides. El ex rector Guillermo Mendoza Cavazos aceptó el trato, argumentando que el Estado debía a la UAT 191 millones de pesos, y que el terreno serviría para construir un campus universitario. El Congreso aprobó la enajenación del terreno en favor de la Universidad, bajo el pretexto de que el Estado necesitaba redireccionar el gasto público por la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) reveló que el Gobierno de Tamaulipas incumplió con sus aportaciones estatales a la UAT, que debían ser de mil 691 millones de pesos en el ejercicio fiscal 2022, y solo entregó mil 190 millones. Es decir, que el Estado le debe a la Universidad más de 500 millones de pesos.

Este escándalo pone en evidencia la corrupción y el desvío de recursos que se cometió en la administración de García Cabeza de Vaca, quien también es acusado por delitos federales. También cuestiona la responsabilidad y la transparencia de la gestión de Mendoza Cavazos al frente de la UAT, quien debió defender los intereses de la comunidad universitaria, y no prestarse a los manejos turbios del Gobierno.

La UAT merece una explicación y una reparación por este atropello, que afecta su autonomía, su calidad académica y su prestigio. Los tamaulipecos merecen saber qué se hizo con el dinero que debía destinarse a la educación superior, y que se sancione a los culpables de este desfalco. Los platos rotos no deben pagarlos los estudiantes, los profesores, ni los contribuyentes, sino los que se sirvieron con la cuchara grande….¿Qué? ¿no?, NOS LEEMOS.

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