Se impone el Acuaman

Por Oscar Díaz Salazar

(16-Agosto-2024).- Sin medir los riesgos y los costos políticos, el secretario de Recursos Hidráulicos del gobierno de Tamaulipas, Raúl «Acuaman» Quiroga, consiguió qué los diputados locales reformarán la «Ley de Aguas», para despojar a los Ayuntamientos del control de los organismos operadores de los sistemas de agua potable y alcantarillado.

La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo 115, señala las atribuciones, facultades y responsabilidades que tienen los Ayuntamientos, colocando en el primer lugar de la lista de asuntos a su cargo, el del manejo del agua, y si bien en otras leyes estatales y federales se contempla la posibilidad de que la responsabilidad del manejo de las redes de agua para usos diversos esté a cargo de otra autoridad, son los gobiernos municipales los que en principio deben asumir esa función.

El funcionario más egocéntrico del gobierno de Tamaulipas, el único que acostumbra convocar y dar órdenes a diputados federales, diputados locales, gerentes de comapas, presidentes municipales y funcionarios de todos los niveles, logró convencer a su jefe de la conveniencia de quitarles a los presidentes municipales el control de las comapas, con el argumento de que son muy ineficientes y corruptos, y en consecuencia dieron linea al legislativo para proceder a ese despojo «legalizado» mediante reformas a una ley estatal, que por supuesto no prevalece sobre la máxima norma jurídica que tenemos los mexicanos.

Es de esperar que los ayuntamientos se «amparen» o cuestionen la legalidad de estas reformas, que no tienen otro fin más allá de darle al Acuaman la oportunidad de rasguñarle al botín de las comapas, siendo una operación inspirada en la máxima esa de que «ladrón que roba a ladrón, tiene mil años de perdón».

El pretexto de la ineficiencia y la corrupción que maneja el Acuaman, y que le «compraron» en el gobierno, tanto en el poder ejecutivo como en el legislativo, no es creíble para quienes observamos desde afuera, pues la corrupción no es privativa de los gobiernos locales y para muestra tenemos los números, los resultados y los escándalos derivados de los malos manejos en las comapas de Rio Bravo y Tampico/Madero, que son controladas por el gobierno estatal.

¿Que va a hacer Acuaman con las comapas corruptas e ineficientes que llevan dos años bajo su custodia? ¿Las piensa entrega a la federación, aplicando la lógica de que los de más arriba son más decentes? Las va a regresar o entregar a los ayuntamientos respectivos de Rio Bravo, Tampico y Madero?

¿Van a replicar la medida con otras áreas y dependencias en donde hay corrupción e ineficiencia? Con esa lógica del Acuaman Quiroga, lógica centralista, tramposa, gandaya, abusiva e ilegal, bien pueden desaparecer los 43 ayuntamientos del Estado y reformar la Constitución para ocupar los cargos a perpetuidad.

Cualquier semejanza con la Ley de Herodes (la película), es mera coincidencia.

Urge la intervención de un colaborador o asesor sensato, que le hagan ver al jefe del gobierno que andan mal, para que le pongan un alto al Acuaman.