23 de septiembre de 2024

Tiempos de Guerra/ Por: Chano Rangel

(9-Noviembre-2023)

¡Después de la tormenta!

Con la llegada de Otis, las cosas cambiaron en Palacio Nacional, las primeras imágenes del Huracán que azoto Acapulco, el paradisiaco destino turístico lucia devastado, pero la mayor devastación no fue en la bahía, si no en el interior del equipo del presidente, sobre todo al saber que la gobernadora no estaba en sus aposentos de poder, si no en la Ribera Nayarit.

Ni su padre Félix Salgado Macedonio, que es pandillero y pleitista supo que decir, su silencio ha dado muchas cosas que pensar, sobre todo cuando se sabe que en Guerrero el verdadero gobernador es el senador y no su hija Evelyn.

Pero si el fenómeno meteorológico azoto la costa guerrerense, sus efectos se están dejando sentir más en Palacio Nacional, sus golpes políticos han dejado al presidente sin marguen de maniobra política en Guerrero, uno de los aportes más solidos de votos electorales.

Las condiciones políticas del país no son las mismas de 2018, la inseguridad rampante. La economía sin funcionar, dependemos aun de remesas de los paisanos, y las presumen como logros de gobierno; y de los precios internacionales del petróleo, donde la empresa más importante de México ha sido rescatada de la quiebra por más de dos veces en este sexenio.

La carga presupuestal fue enviada al aeropuerto Felipe Ángeles, a la Refinería de Dos Bocas, al Tren Maya, que insisto quizá la única obra que en un futuro próximo podrá ser rentable, pero esos presupuestos también ya se acabaron, los dineros públicos han sido lapidados, los apoyos en efectivo no han resuelto la pobreza, pero si acabaron con los ahorros de mexicanos y de todo aquellos que los gobierno que tanto se critica, habían ahorrado para contingencias financieras en el futuro.
Ya no hay dinero de donde agarrar, el huracán Otis, puso al descubierto el gran hoyo y grietas en el sistema de la 4T, no hay por donde tapar el resumidero y dejar de darle dinero a la gente seria un suicidio político en plena lucha electoral, eso lo sabe el presidente y también sabe que, si deja morir a Acapulco solo, su futuro en las elecciones del 2024 también está en riesgo.

La lucha feroz por las 9 gubernaturas en disputa el año que entra, ha puesto a Morena en la antesala de una batalla campal interna, donde el llamado líder Mario Delgado, será hecho a un lado, porque los actores que participan tienen la línea directa con el mandatario.

Los pagos de favores también están a la orden del día como la candidatura en Puebla para el senador Armenta, incondicional de Ricardo Monreal, y de ahí la fractura puede ser con Ignacio Mier, líder de la bancada de Morena en el congreso federal.

Pero eso no lo es todo, en las regiones del país, por ejemplo, se encuerda hasta los relojes de arena, en Reynosa le han dado alas a un desconocido y simple Luis Miguel Iglesias, que, de ser seguidor del partido Verde, ahora resulta que ya quiere ser alcalde de la ciudad más importante de Tamaulipas, sin más currículo que ser amigo de algún personaje ecologista, pero si experiencia, y cero trayectorias políticas, así como decir chalupas y buena.

Cuando se quiere abarcar mucho, se termina por no tener nada, el morenísimo está en su mayor encrucijada, lo que Otis dejo al descubierto, no solo fue un destino turístico emblemático devastado, si no que dejo ver cuáles eran las columnas dañadas, cuáles eran los puntos rojos, y cuáles son las mayores debilidades de esta cuarta transformación.

Por eso el presidente de la república quiso imponer su poder para que toda la ayuda a los damnificados de Acapulco llegara a través de la Marina o el ejército, pero la sociedad civil perdió confianza en el gobierno, y supero por mucho, los acapulqueños recibieron de manera directa la ayuda ciudadana.

Las regiones de todo el país suman o se van, se adaptan con personajes ganadores o de plano tendrán que dejar para otra ocasión sus sueños de participar, un huracán dejo claro que nada es invencible.

Es cuánto.
De Aquello y lo demás…

Después de analizar número y posibilidades queda claro, que la capital del empleo puede ser disputada en serio o de plano irse como cuchillo en mantequilla.

Si las decisiones son las correctas Reynosa puede ser un parteaguas en el sentir político, la reelección no debería de ser un problema para el actual alcalde Carlos Peña Ortiz, quien en dos años a logrado poner a la ciudad en el plano nacional.

El reconocimiento de los inversionistas en Reynosa, son clave para que la ciudad mantenga su índice de crecimiento, para que sea la ciudad que genera el 60% de los empleos del estado, que sea la ciudad que más votos aporta y la ciudad con mejores opciones de crecimiento y de inversión, como lo expresan empresarios nacionales y extranjeros.

Si es cierto, también es de reconocer que la ciudad muestra deficiencias en muchos rublos, como el de agua potable, y servicios básicos en varios sectores, por una sencilla razón su crecimiento ha sido exponencial; y no hay dinero que alcance para traer tantas obras para igualar el crecimiento.

Pero desde Palacio Municipal de Reynosa, las cosas se han hecho bien, en educación, cultura y deporte, en obras públicas y en agua potable, todo ese trabajo se refleja en las encuestas, que no son producto de la casualidad, si no del trabajo diario.

chanorangel@live.com.mx